Cualquiera que tiene un negocio sabe lo difícil que resulta poder cuidarlo en todos los aspectos posibles, por ejemplo el cuidarlo de la competencia, todos sabemos cómo están las cosas en este país, como están las familias económicamente hablando y la verdad es que si encuentran productos más baratos no dudan en comprarlos. Son muchas las tiendas de chinos que podemos encontrar en cualquier ciudad y muchos los descuentos que suelen poner, imaginemos por un momento cuanto les puede costar a ellos los productos para rebajarlos de esa manera, aunque creo que ese es otro tema que podremos hablar en otra ocasión. De vuelta al tema de los negocios huelga decir que no solo la competencia es para ellos un problema para salir adelante, sino que para el pequeño o mediano comerciante el tema de los hurtos se convierte en otro grave problema al que creo que no le damos la mayor importancia. Y es que no todos disponen de los medios paras poner alguna medida de seguridad, hay quienes con pagar el alquiler, cuotas de autónomo, luz, y cientos de facturas más apenas le llega para sacar un sueldo digno, como para poner cámaras de seguridad.

Es por eso que se ven y se desean en torno a sus tiendas para poder protegerla del todo, no siempre pueden estar atentos ya que el atender bien a la clientela puede robarles mucho tiempo y ser el despiste perfecto para los cacos que quieren llevarse lo que no es suyo. Y es que por desgracia ya no solo se conforman con robar un producto de nada que al final vale poco sino que van mucho más allá intentando introducir al comerciante billetes falsos que no sirven para nada, imaginemos por un momento la situación en la que se puede llegar a encontrar, ya que el producto robado puede ser repuesto enseguida e igual las pérdidas no son escandalosas, pero la recogidas de un billete por ejemplo de cincuenta euros que no sirve para nada puede generar en su economía un pequeño bache difícil de reponer. Es por eso que están tan de moda en cualquier tienda que podamos visitar el uso de detectores de billetes falsos con los que se aseguran que por lo menos en dinero no se la van a colar, prefiriendo enfrentarse a los hurtos que por lo menos les cuesta menos.